Por Paul Cabrera
El bullicioso mercado de ‘La Cuchilla’, emplazado en la capital del estado de Puebla, ha capturado la atención tanto de México como de Estados Unidos, siendo catalogado como uno de los puntos calientes de la piratería y la actividad criminal desenfrenada.
En un informe reciente de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR), ‘La Cuchilla’ emergió como el epicentro de la falsificación y el robo de derechos de autor en el sureste de México. Con aproximadamente 120 almacenes y 150 tiendas, el mercado es un hervidero de productos falsificados y pirateados, incluyendo copias ilícitas de videojuegos y dispositivos electrónicos.
Este reconocimiento no es nuevo. Desde la revisión de 2023 de los mercados notorios de falsificación y piratería, ‘La Cuchilla’ ha sido señalada como un enclave peligroso y una fuente importante de productos de origen dudoso. Ubicado en Boulevard Norte 1529, colonia Cleotilde Torres, La Loma de la capital poblana, el mercado ha sido objeto de numerosos operativos destinados a confiscar artículos de procedencia ilícita.
Sin embargo, su infame reputación va más allá de la piratería. En junio de 2023, la Fiscalía General del Estado de Puebla descubrió dos cuerpos enterrados dentro del mercado, pertenecientes a una pareja desaparecida desde junio de 2022. Este descubrimiento puso de relieve la oscura realidad de ‘La Cuchilla’, donde actividades como la prostitución, el narcomenudeo y los homicidios se han vuelto moneda corriente.
Las autoridades, conscientes de la gravedad de la situación, han considerado la expropiación del mercado como una medida para frenar la delincuencia desbordada. Tanto el mandatario Sergio Salomón Céspedes como el ex gobernador Miguel Barbosa Huerta han reconocido la necesidad de abordar la situación, calificando a ‘La Cuchilla’ como un lugar “incontrolable” y un “foco rojo” para la seguridad pública.
A pesar de los esfuerzos por tomar medidas drásticas, los avances han sido lentos y los residentes del mercado afirman no haber tenido acercamientos con las autoridades. Mientras tanto, ‘La Cuchilla’ sigue siendo un recordatorio sombrío de los peligros del comercio ilegal y la impunidad que lo acompaña. En un contexto donde la propiedad intelectual y la seguridad ciudadana están en juego, el desafío de controlar este enclave criminal persiste, dejando a Puebla y a México enfrentando una batalla sin fin contra la piratería y la criminalidad desenfrenada.
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