Luego de que se dieran a conocer varios videos en los que buzos nadan junto a extrañas criaturas, similares a una serpiente o gusano translúcido, en las costas occidentales de Estados Unidos, los especialistas informaron que se tratan de pirosomas o “pepinillos de mar”.
A partir de la creciente presencia de pirosomas, los investigadores de la Universidad Estatal de Oregón alertaron que su presencia se debe al cambio climático que afecta la temperatura de las aguas, así como los ecosistemas naturales de estos animales.
En el video que hizo sonar la alarma entre los internautas se observa como un buzo flota mientras un pirosoma, que aparece como un gusano largo y sin ojos, nada a su lado sin prestarle atención.
Los pirosomas, que pueden alcanzar hasta 18 metros de largo, preocupan a los especialistas debido a su impacto en el ecosistema marino.
¿Qué son los pirosomas?
Aunque pueden parecer extraños, los pirosomas son en realidad colonias de organismos complejos compuestos por miles de zooides, células especializadas que se agrupan en un tubo cilíndrico o en forma de barril.
Habitualmente encontrados en aguas tropicales y templadas, los pirosomas tienen una estructura transparente y tubular que puede alcanzar tamaños impresionantes, desde unos pocos centímetros hasta varios metros de longitud.
A menudo se les describe como “cuerdas de mar” o “tubos” debido a su forma alargada y a la manera en que flotan en el océano.
Los pirosomas, organismos marinos coloniales, se reproducen de manera asexual mediante gemación. Además de la reproducción asexual, algunos pirosomas también pueden liberar gametos sexuales que, una vez fecundados, dan lugar a larvas que se desarrollan hasta convertirse en nuevos individuos adultos, habilidad que algunos califican como de auto clonación.
Una de las características más notables de los pirosomas es su capacidad para generar luz, lo que les ha valido el nombre común de “dragones de mar” o “luciérnagas del mar”.
Esta bioluminiscencia, producida por una reacción química en su interior, puede ser tanto para atraer presas como para defenderse de los depredadores.
Además de su función lumínica, los pirosomas desempeñan un papel importante en el ecosistema marino al filtrar el agua y consumir partículas de plancton.
Aunque son criaturas poco comprendidas, su singularidad y belleza los convierten en sujetos de gran interés para científicos y entusiastas del mundo marino.
Crédito: Excelsior