En la actualidad los procedimientos estéticos son más comunes y seguros, pero siguen existiendo excepciones que ponen en peligro la vida de las personas que solo buscan verse mejor.
Esto fue algo que le ocurrió a Ester Maia Corecha da Silva, de 25 años, originaria de Brasil, quien después de un procedimiento “extraño” terminó en silla de ruedas.
Según comparte el medio Daily Mail, la joven brasileña de 25 años buscaba verse mejor por lo que acudió a que le realizaran un procedimiento para eliminar la grasa abdominal y la celulitis.
Pero desde el principio la mujer sospechó de la situación, pues la persona que le haría esto la citó en su residencia, pero Maia no dudó de ella y decidió continuar.
Fue después de unas horas que el dolor y la inflamación en la zona de la cadera comenzó, pues resulta que los productos utilizados se comenzaron a filtrar en la piel.
Tras ir al hospital se dieron cuenta que comenzó a desarrollar quistes y tejidos anormales llamados nódulos que se habían extendido hasta el cóccix.
Sin embargo, pocas horas después, la madre de uno de sus hijos fue trasladada de urgencia al hospital porque sus nalgas se inflamaron y desarrolló un dolor debilitante.
‘Los médicos dijeron que este producto puede migrar. Incluso podría llegar a mis pies” comentó la joven para medios locales.
Ahora, meses después del procedimiento, la mujer continua en la silla y se ve en la necesidad de pedir a su madre que la ayude a cuidar de su hija autista.
“Verla [a mi hija] en silla de ruedas hoy es muy doloroso”.
No se sabe exactamente cuál fue el procedimiento que se hizo, pero los expertos aseguran que varios tratamientos son peligrosos.
El doctor Fábio Santiago, cirujano plástico de Brasil, dijo a los medios locales: “Aparte del ácido hialurónico, no hay otra sustancia considerada segura para dar volumen a los glúteos”.