
La cantante británica Brocarde ha generado titulares internacionales al compartir su peculiar historia de amor con un ser del más allá: se casó y luego se divorció de un fantasma llamado Edwardo, un soldado victoriano.
La ceremonia paranormal tuvo lugar en 2022, en una antigua iglesia de Gales. Aunque no hubo testigos humanos del novio, Brocarde asegura que fue una boda legítima, con todos los rituales, votos y simbolismo que acompañan un matrimonio tradicional.
Sentí que Edwardo era el alma gemela que había estado esperando toda mi vida”, confesó Brocarde en entrevista con The Mirror.
La artista conoció al espíritu a través de una “presencia” que comenzó a manifestarse en su hogar. Con el tiempo, desarrolló una relación emocional intensa que desembocó en el matrimonio con el fantasma. Según ella, el fantasma tenía una personalidad fuerte, pero era amoroso, protector y muy celoso.
Me enviaba señales todo el tiempo. Las luces parpadeaban, susurraba mi nombre… era imposible ignorarlo”, relató.
El matrimonio, sin embargo, no fue eterno. A pocos meses de haberse unido, Brocarde decidió poner fin a la relación debido a “comportamientos posesivos” por parte de Edwardo. Asegura que su esposo fantasmal se volvió controlador y celoso, especialmente cuando ella trabajaba en su música o viajaba.
Edwardo comenzó a aparecer en mis sueños gritándome, no podía ni dormir tranquila”, explicó la artista, quien afirma haber recurrido a un médium para disolver el vínculo espiritual.
Brocarde es una cantante británica independiente conocida por su estilo gótico y teatral. Según su versión, conoció al fantasma Edwardo durante una meditación, y desde entonces comenzó a experimentar fenómenos paranormales en su casa. Al investigar sobre la identidad del ente, supo que se trataba de un soldado victoriano que había fallecido trágicamente.
La ceremonia fue celebrada en una iglesia abandonada en Gales. Brocarde se vistió de blanco, llevó flores y leyó votos frente al altar. Aunque nadie más pudo ver al novio, ella asegura que “lo sentía a su lado”.
También afirma que el matrimonio incluyó una “luna de miel espiritual” en la que compartieron experiencias psíquicas intensas.
Lo que comenzó como una relación de amor, terminó con una ruptura emocional. Brocarde explicó que Edwardo se volvió tóxico, impidiéndole avanzar en su carrera y perturbando su tranquilidad emocional.
Aunque ya no están juntos, Brocarde asegura que aprendió de la experiencia y que sigue creyendo en el amor… incluso si proviene del más allá.
Crédito: Excelsior