
Volkswagen de México anunció paros técnicos en los segmentos del Jetta y la SUV Tiguan, del 21 al 25 de julio y del 28 de julio al 3 de agosto, que se suman a los previstos para las semanas 30 y 31 del 25 de agosto al 7 de septiembre, en medio de ajustes en los mercados del exterior de esos modelos.
Mientras, para la semana 31 la suspensión también se aplicará a la SUV Taos.
En el primer semestre Volkswagen de México produjo un volumen de 159 mil 265 unidades, una baja del -21.2 por ciento.
De ese volumen, 54 mil 404 unidades correspondieron al auto Jetta y 44 mil 296 a la SUV Tiguan, mientras que la Taos es la más ensamblada en Puebla con 60 mil 465 camiones ligeros.
La armadora detalló que la suspensión tiene como objetivo principal recuperar los stocks de seguridad de materiales en sus plantas productivas, siendo el único relacionado con la gestión de sus inventarios.
A través de un comunicado el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz Volkswagen, informó que del 21 al 25 de julio se aplicará un paro de producción en el segmento 1, correspondientes a las líneas de producción de los modelos Jetta y Tiguan.
El paro, se aplicará a los 3 turnos del segmento 1.
De acuerdo al documento, a aquellos trabajadores cuenten con más de 12 días de vacaciones disponibles, se les tomará un día de descanso con el sistema 2×1, y menciona que el regreso a las áreas será bajo listado y dependiendo de los equipos y materiales requeridos.
Previamente, el 11 de julio, Volkswagen de México notificó a sus proveedores que llevaría a cabo un paro productivo en las semanas 31 y 31 (entre el 21 de julio y 3 de agosto) e indica que será el único paro productivo programado para el año, como parte de sus políticas de gestión de inventarios, con el fin de garantizar el equilibrio en el suministro de materiales y la eficiencia en sus procesos productivos.
La suspensión de actividades se llevará a cabo a pocas semanas de que venza el emplazamiento a huelga correspondiente a la revisión salarial 2025, programado para el 18 de agosto, en el que, de acuerdo a las asambleas divisionales efectuadas en el mes de abril, la representación sindical solicitará un incremento de entre el 15 y 18 por ciento.