El temporal que azota España, que anega el sur y el este, provocó inundaciones, cortes de tráfico, cultivos destrozados e incluso el descarrilamiento de un convoy del AVE en “el día más adverso y excepcional” del actual episodio meteorológico, mientras se busca a cinco desaparecidos.
Bomberos de rescate y un helicóptero de la Guardia Civil tratan de encontrar a cuatro personas que están “no localizadas” tras las fuertes lluvias en Letur (Albacete, sureste del país), que provocaron el desbordamiento del arroyo y que una tromba de agua haya atravesado el casco urbano del municipio.
También se busca a un camionero que desapareció en l’Alcudia (Valencia, oeste de España), una de las zonas más afectadas por el intenso temporal de lluvia y viento que azota este martes la región. Se trata de un hombre que estaba trabajando con su camión y del que no se tiene conocimiento de su paradero.
Las lluvias torrenciales y las tormentas eléctricas han creado una situación “excepcional” en España que afecta especialmente a la mitad sur peninsular y la mayor parte de Levante.
De hecho, el temporal ha obligado a cerrar tanto el puerto de Valencia como el de Sagunto, ambos en la misma región.
Además, hay localidades especialmente castigadas como la de Utiel, donde las lluvias y el desbordamiento del río Magro obligó a la movilización de la Unidad Militar de Emergencias.
Las autoridades reiteraron el llamamiento a la precaución porque la abundancia de lluvias puede ser peligrosa en distintos puntos del país, especialmente en zonas bajas y en las ramblas y barrancos que habitualmente cuentan con escaso caudal y ahora ven este muy crecido.
La propia ministra española de Transición Ecológica, Teresa Ribera, pidió a través de una publicación en la red social X “máxima cautela en el área mediterránea” antes las “preocupantes alertas de Aemet y los servicios de Protección Civil”, cuyos consejos y recomendaciones “debemos seguir”, añadió.
En Andalucía, las provincias españolas más afectadas hasta ahora son Málaga, Almería y Granada, con en torno a unas 250 emergencias causadas por inundaciones en bajos de viviendas, sótanos, garajes y vías.
En el malagueño Valle del Guadalhorce las precipitaciones provocaron el desbordamiento del río a su paso por Álora, donde hay viviendas anegadas, algunas personas atrapadas en sus casas y numerosos vehículos arrastrados por el agua.
Además, una de las piezas del tren de alta velocidad (AVE) que viajaba entre Málaga y Madrid con 291 pasajeros a bordo descarriló, sin que hubiera heridos.
En la localidad almeriense de El Ejido, una granizada “con pedruscos del tamaño de bolas de pimpón” según los agricultores causó grandes daños en los invernaderos y afectaron a entre 4.500 hectáreas y 11.300.