Los resultados de las elecciones del próximo martes en Estados Unidos estarán definidos en gran parte por la comunidad latina del país, que pese a encontrar mayores dificultades a la hora de ejercer su derecho al voto se está movilizando históricamente en estos comicios, según la Federación Hispana.
“Más del 72 % de los latinos están interesados en participar en las elecciones y están buscando y recibiendo más información, así que creemos que el camino a la Casa Blanca va a ser a través de nuestra comunidad”, expresa en entrevista con EFE el director de la asociación, el puertorriqueño Frankie Miranda.
Esta organización sin ánimo de lucro tiene como uno de sus objetivos animar a votar a la población latina con derecho a voto en el país, especialmente en estas elecciones, en las que este sector ha sido uno de los principales focos de los candidatos en sus campañas.
De esta forma, la federación, presente en 40 estados del país, además de en el distrito de Columbia, las Islas Vírgenes y Puerto Rico, trata de educar a la comunidad latina “en la importancia del voto” a través de SMS y llamadas en las que se le informa sobre cómo registrarse en los colegios electorales.
Según Miranda, hay 36 millones de votantes latinos con derecho a voto (siempre que pasen el trámite de inscribirse) en estos comicios.
El director de la Federación Hispana incide en que el mitin del republicano Donald Trump el pasado domingo, en el que un comediante llamó a Puerto Rico “una isla flotante de basura”, ha ayudado a movilizar el voto de este sector.
“Lo que ocurrió en el mitin republicano en Nueva York ha hecho que las personas reaccionen desde el corazón. Es una cuestión muy emotiva, no hay nada que movilice más a la comunidad puertorriqueña que su isla”, expresa Miranda.
Aunque la federación se define como “no partidista” y rehúsa sumarse a uno u otro candidato, el puertorriqueño critica las palabras del comediante Tony Hinchcliffe en el mitin del domingo y afirma que la asociación “no va a permitir” ese tipo de “lenguaje” ni la “caracterización de nuestra comunidad”.
A la población puertorriqueña “no le va a dar tiempo a olvidarse de los comentarios” vertidos en el mitin, añade Miranda.
Y destaca que tres cuartas partes de la comunidad latina que residen en los estados pendulares votarán por la demócrata Kamala Harris, según una encuesta de la federación.
Pese a su papel decisivo en las próximas elecciones, la población latina encuentra mayores dificultades a la hora de ejercer su derecho al voto: “Hay barreras culturales y lingüísticas, dependiendo de cada comunidad y de cada generación. No es lo mismo hablar con latinos en Nueva York que en Florida, Texas o Arizona”, explica Miranda.
Entre estos obstáculos, está el de conseguir personas que puedan traducir al español la información electoral o las dificultades de cada estado para inscribirse (pues hay zonas en las que uno puede registrarse el mismo día de los comicios y otros con mayores restricciones).
Miranda incide en que también influye “la falsa narrativa de que ha habido fraude en las elecciones”, que se ha usado para limitar el voto de comunidades como la latina.
Por otro lado, Miranda considera que el argumento de que la población latina está derivando a posiciones más conservadoras y típicas del partido republicano es falso, y señala que, en realidad, el apoyo a los candidatos por parte de este grupo está “empatado”.
Aunque reconoce que a la población latina le preocupa especialmente el trabajo, la inflación, el costo de vida y las viviendas asequibles, asegura que también están interesados en otros temas como los derechos reproductivos, una reforma de inmigración, el cambio climático o los derechos LGTBI, valores más asociados con la agenda demócrata.