La oficina del gobernador de Puebla está tomada por técnicos, camarógrafos, asistentes, responsables de la comunicación gubernamental y productores; todos en silencio observado y escuchando las declaraciones que sin chistar, va soltando el propio Alejandro Armenta en la primera entrevista que acepta bajo este formato.

El objetivo es realizar una conversación periodística de cara al primer año de gobierno que se alcanza en Puebla este 14 de diciembre, sin embargo, el ejercicio va tomando un ambiente propicio para profundizar mucho más y con seriedad en temas como la corrupción, la inseguridad, la justicia, el abuso del poder, la simulación, la libertad de expresión y los resultados que espera una sociedad ávida de soluciones y trabajo.

Alejandro Armenta reconoce que gobernar es complejo y asegura que lo es mucho más si no estas preparado mental y emocionalmente para las propuestas de negocio que a diario intentan empresarios, constructores, recomendados, conocidos y hasta autoridades incautas que se acercan para ver si “pega” la idea o el negocio.

“No te puedes imaginar el grado de cinismo que hay en muchas personas que ven al gobierno como la oportunidad para enriquecerse… la corrupción es el cáncer de este país y de esta sociedad” me dice al asegurar que hoy se hace acompañar por un abogado en muchas de las audiencias privadas que le solicitan porque en algún momento puede brincar la invitación a lo que él llama “moche” o “milpa”.

Después de detallar como un constructor le ofreció ganar mucho dinero a cambio de renegociar una obra in concluir, el gobernador confiesa: “estamos desmantelando el régimen de complicidades y de corrupción, de intereses perversos que buscan enriquecerse a costa de lo que sea…”, hace una pausa y suelta: “Yo escucho a gente que desde la política dice que hay que hacer dineros, dineros, dineros… esa expresión a mi me molesta y mucho, sin embargo hay políticos que llegan y solo piensan en hacer eso que ellos llaman dineros, al servicio público lo ven como el gran negocio…”

Corrupción.

El ejecutivo poblano asegura que piensa cumplir su palabra al no quedar señalado en el futuro como partícipe de la eterna corrupción desde el poder. Dice que él ofreció a su familia no mancharlos de por vida con acusaciones sobre su conducta o la de tercero en su gobierno.

Al cuestionarle sobre cómo piensa cumplir esa promesa ante un sistema hundido en la ilegalidad y en la simulación, me sostiene que todos en su gobierno saben las consecuencias de caer en la corrupción y sostiene que se harán las denuncias, las investigaciones y las separaciones que sean necesarias para castigar a los voraces e incautos, “muchos en mi gobierno piensan que no me entero o no me importa, se equivocan, los vamos a denunciar y evidenciar”.

Seguridad.

Han transcurrido más de 50 minutos de una entrevista que lejos de ser cómoda ha resultado oportuna para el propio entrevistado y sin duda por ello me adelanta información en exclusiva. A partir de este jueves 11 de diciembre inicia la estrategia “Puebla Segura”, un plan en el que la zona metropolitana y Puebla capital estarán siendo vigiladas por tierra a través de una nueva sectorización y coordinación con la policía municipal, guardia nacional, SEDENA y la Marina Armada de México, a esas acciones y también a partir de este jueves dos helicópteros del gobierno del estado sobre volarán día y noche la zona más poblana del estado.

Uno de los helicópteros que se utilizarán para vigilar y hacer operativos será el modelos Augusta que tiene tecnología para llevar a cabo vuelos nocturnos. Las aeronaves también se utilizarán para acciones coordinadas de auxilio en zonas de desastres naturales y en temporadas de incendios forestales.

Alejandro Armenta, reconoce que Puebla atraviesa por uno de los momentos mas complejos en materia de seguridad y por ello me adelanta que intensificará como nunca, el trabajo de inteligencia, prevención y persecución a la delincuencia organizada y a las expresiones de la delincuencia común.

Antes de cerrar la conversación, el ejecutivo estatal confiesa que vive con intensidad su ejercicio gubernamental porque desde joven soñó con poder estar al frente de una entidad como Puebla… se reconoce en ocasiones agotado por el ritmo de trabajo que él mismo ha puesto a su administración, sin embargo, tiene claro que esta es una oportunidad única para cumplir un anhelo, hacer un cambio y trascender como uno de los gobernadores mas justos y honorablesen la historia de Puebla.

Me despido recordando que el sistema es perverso, que la corrupción seduce todos los días y que los intereses políticos son infinitos, insospechados y traicioneros.

Su respuesta me da claridad de la conciencia que guarda al respecto: “Lo sé muy bien Iván y hoy te puedo ver a los ojos a ti, a mi familia y a cualquier poblano, estoy firme en mis convicciones, esta es una carrera de resistencia que pienso terminar así, limpio…”.