Flamenco en pirámides para denunciar el maltrato de camellos y caballos

Flamenco Ante Las Pirámides De Guiza Para Denunciar El Maltrato De Camellos Y Caballos

La bailaora española Ángela Alonso, afincada desde hace más de dos décadas en Londres, prepara una acción artística insólita: bailar vestida de flamenca ante las pirámides de Guiza para denunciar el maltrato que sufren los camellos y caballos utilizados para el turismo en Egipto.

La iniciativa se llevará a cabo el sábado 15 de noviembre, víspera del Día Internacional del Flamenco, y formará parte de una doble propuesta con la que busca dar voz a los animales maltratados.

Ángela, fundadora de la escuela ‘Ilusión flamenca’, una de las academias de referencia en la capital británica, explica a EFE que su idea surgió “como una forma de llamar la atención de los turistas y del mundo” sobre el sufrimiento de los animales que son explotados en las inmediaciones de las pirámides egipcias.

“Mi intención es ir vestida de flamenca y bailar allí para que la gente se dé cuenta de lo que pasa”, dice, y avanza que grabará todo en vídeo, tanto en inglés como en español, para que los que lo vean “piensen en el dolor de esos caballos y camellos”.

La bailaora asegura que presenció escenas difíciles de olvidar: animales exhaustos, deshidratados y sometidos a largas jornadas bajo el sol para transportar a visitantes. “El sufrimiento que padecen es terrorífico. Muchos mueren deshidratados y exhaustos. Es algo que no puedo mirar sin hacer nada”, relata.

Consciente del impacto simbólico del flamenco -declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad-, la bailaora quiere convertir su arte en un altavoz contra la crueldad animal. No será una actuación comercial ni un espectáculo preparado, sino un gesto individual de protesta pacífica y esperanza.

“Bailo porque es lo que sé hacer, y es mi forma de gritar sin palabras”, resume.

Castañuelas desde Alejandría

La acción de Guiza será la antesala de otra jornada simbólica: el domingo 16 de noviembre, coincidiendo con el Día Internacional del Flamenco, Ángela Alonso ofrecerá una clase de castañuelas, instrumento típico del flamenco, retransmitida desde Alejandría (Egipto), en el refugio de perros que ella impulsó allí. Los fondos recaudados se destinarán íntegramente a la manutención y cuidado de los animales acogidos.

“Voy a enseñar castañuelas en directo desde el refugio y presentaré a los perros que viven allí. Les pondré flores o pañuelos de lunares, algo flamenco, o al menos lo intentaré, si me dejan…”, cuenta.

Además, anima a todas las personas interesadas en colaborar a aportar sus conocimientos o recursos para sostener ese centro canino, desde ayuda en redes sociales, diseño web o fotografía, hasta la participación de veterinarios o tiendas de animales que deseen donar comida o materiales.

La bailaora combina su faceta solidaria con su labor como docente en Londres, donde enseña flamenco desde 1998. Su academia ha ganado dos premios Lukas Awards a la mejor escuela de flamenco del Reino Unido y ha participado en más de un centenar de festivales.

A lo largo de los años, Ángela ha colaborado con diferentes asociaciones de protección animal, entre ellas Jarjeer Mules, un santuario de burros y mulas cerca de Marrakech (Marruecos), y Takis Shelter, una protectora de perros y gatos en Creta (Grecia).

“Yo no tengo grandes recursos, pero tengo arte y tengo voz. Si el flamenco sirve para aliviar el sufrimiento de un solo animal, ya habrá merecido la pena”, concluye.

Desde el desierto de Guiza hasta las calles de Alejandría, el compás de su taconeo quiere ser una llamada universal a la compasión. Un gesto mínimo frente a una realidad inmensa, pero impulsado -como el flamenco mismo- desde el corazón.

En línea noticias 2024