Gobierno francés acepta abrir revisión de reforma de pensiones
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El Gobierno francés aceptó este martes revisar la impopular reforma de las pensiones, aunque sin comprometer el equilibrio financiero del sistema, como forma de asegurar su supervivencia a corto plazo.
Este fue el principal anuncio del primer ministro, el centrista François Bayrou, en su presentación ante la Asamblea Nacional del programa de su Gobierno, formado el pasado 23 de diciembre.
El anterior Ejecutivo del conservador Michel Barnier cayó en diciembre a causa de la moción de censura apoyada por los cuatro partidos del bloque de izquierda y por la extrema derecha, en una alianza inédita y puntual motivada por la negociación del presupuesto para 2025.
Con este antecedente, Bayrou dedicó la principal parte de su intervención a reiterar el problema de la deuda pública francesa, que ha crecido de forma notable en los últimos años, y cuyo servicio constituirá dentro de pocos años el capítulo más abultado del presupuesto.
La deuda, que supera ya el 112 % del producto interior bruto francés, “es una espada de Damocles sobre nuestro país y nuestro modelo social”, advirtió Bayrou.
También recordó que cada año se pagan en Francia unos 380.000 millones de euros en pensiones y que las cotizaciones cubren unos 325.000, lo que significa que los otros 55.000 millones deben llegar de los presupuestos de las Administraciones públicas, que tienen que recurrir al endeudamiento.
En sus contactos para buscar el apoyo, aunque fuera implícito, del Partido Socialista, el grupo más moderado de la alianza izquierdista, este partido había exigido la derogación de la discutida reforma de las pensiones.
Sin embargo, esa reforma tiene el apoyo de los principales socios del Gobierno -el bloque macronista y la derecha conservadora-, por lo que Bayrou solo ofreció hoy un proceso de renegociación y revisión, limitado a tres meses, entre la patronal y los sindicatos.
Bayrou avanzó que el viernes se reunirá ya con los interlocutores sociales para lanzar ese diálogo, en el que “se tienen que poder plantear todas las cuestiones”, pero advirtió de una condición básica: “La única exigencia fijada es que no podemos permitir que empeore el equilibrio financiero que buscamos y sobre el que todo el mundo está de acuerdo”.
Esta oferta fue muy escasa para los socialistas, cuyo portavoz Boris Vallaud reprochó al primer ministro que llegara al debate con lo que consideró escaso bagaje: “¿Dónde están sus compromisos?”, dijo, antes de que recalcar que “las cuentas no salen”.
Sin embardo, y tras reiterar que su partido quería “la derogación de la reforma” de las pensiones, insistió que ha asumido la “responsabilidad” de “ser útil” ante la difícil situación, por lo que continuarán las conversaciones con el Ejecutivo “pero sin volver a la ley anterior”.
Estas negociaciones han valido a los socialistas acusaciones de “traidores” por parte de la más radical La Francia Insumisa (LFI).
La portavoz de LFI en la Asamblea Nacional, Mathilde Panot, recordó que su partido ha presentado una moción de censura que se debería discutir y votar el jueves, y que tendrá el apoyo de los ecologistas.
“Cuando antes se vaya usted, mejor”, le espetó Panot a Bayrou, a cuyo Gobierno definió como “el réquiem del macronismo”.
El portavoz comunista no fue claro acerca de si apoyarán esa moción de censura, ya que dio a entender que “la hora de la verdad será el proyecto de presupuesto” para 2025. El líder comunista, Fabien Roussel, dijo después en unas declaraciones televisivas que “si no hay cambios, apoyaremos la (moción de) censura”.
En la extrema derecha del RN, Jean-Phillippe Tanguy, criticó con dureza el discurso programático del primer ministro pero, aunque no se pronunció con claridad, tampoco indicó que su partido volvería a unirse -al menos por ahora- a la izquierda en otra moción de censura.
Todo ello deja al Gobierno de Bayrou a salvo, por ahora, de caer el jueves, aunque su base parlamentaria sigue siendo muy frágil, ya que solo cuenta con el apoyo 210 diputados (y de cuatro grupos políticos distintos) de los 577 que componen la Asamblea Nacional.