
El superintendente jamaicano de la Policía, Coleridge Minto, informó este miércoles de que se hallaron al menos tres personas muertas en Black River, en el municipio de Saint Elizabeth, donde tocó tierra el martes el huracán Melissa de categoría 5, en el suroeste de Jamaica.
“Estamos aquí en Black River, la capital de Saint Elizabeth. No sé ni por dónde comenzar. Las condiciones aquí son devastadoras, catastróficas, está todo arrasado. El hospital está totalmente devastado. Todas las instalaciones de la Policía están destruidas”, lamentó Minto en declaraciones difundidas por la Fuerza Policial de Jamaica (JCF, en inglés), en la red social X.
“Así que en este momento, no podemos hacer ningún rescate, no podemos responder. Así que estamos tratando de que todos sepan que la situación aquí es devastadora. Hicimos todo lo que pudimos y las condiciones van a deteriorarse a medida que el día avanza. Es un momento frustrante, pero estamos apelando a la calma”, añadió el uniformado.
El jefe de la Fuerza Policial de Jamaica en Saint Elizabeth precisó que, de acuerdo a los reportes de daños, el sur de la provincia ha recibido el mayor impacto, la iglesia ha quedado “significativamente impactada”, toda la infraestructura y todos los edificios tienen daños.
“Las tiendas, los supermercados, todo se inundó de agua. Así que la situación en realidad es muy mala en este lugar”, sentenció Minto.
Por su parte, el primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, indicó en un mensaje en su perfil de Facebook que hoy es el primer día de la recuperación nacional y las autoridades están “actuando con rapidez para evaluar los daños y llevar ayuda”.
“Ahora me encuentro en Saint Elizabeth y las imágenes de destrucción están por todas partes. Los daños son enormes, pero vamos a dedicar toda nuestra energía a organizar una recuperación sólida”, expresó el mandatario, junto a un video con imágenes aéreas de la devastación.
“Queremos asegurar a todos los jamaicanos, especialmente a los que viven en los distritos occidentales, que su Gobierno está firmemente a su lado. Sabemos que muchos de ustedes están sufriendo, se sienten inseguros y ansiosos tras el paso del huracán Melissa, pero quiero que sepan que no están solos”, aseveró Holness.
Por otro lado, el Ministerio de Salud y Bienestar de Jamaica hizo un llamamiento a la población para que done sangre “tan pronto como las condiciones lo permitan”, ya que las reservas de las que disponen en los bancos de sangre son bajas debido a las interrupciones del servicio energético por el huracán.
Más de 500.000 personas permanecen sin electricidad en Jamaica y al menos 15.000 han tenido que refugiarse, después del paso del huracán Melissa, que azotó la isla con lluvias torrenciales y fuertes vientos que dejaron carreteras intransitables, seis hospitales dañados y decenas de viviendas sin techo.
De acuerdo a Desmond McKenzie, el ministro jamaicano de Desarrollo Comunitario y responsable de la respuesta ante desastres, los municipios con mayores daños son Clarendon, Manchester, Saint Elizabeth y Westmoreland, donde muchas comunidades siguen aisladas y las vías están intransitables.
Además, el Aeropuerto Internacional Sir Donald Sangster, localizado en la Bahía de Montego, en el noroeste de Jamaica, reportó severos daños en la estructura de una de sus terminales.