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Miles de argentinos salieron a las calles, no sólo en la capital, Buenos Aires, sino también en otras ciudades importantes del país e incluso en la ciudad suiza de Davos o en la Embajada Argentina de Madrid. Las protestas fueron organizadas por grupos LGBTIQ+ y asociaciones feministas en respuesta a los recientes y polémicos comentarios del presidente Javier Milei.
La denominada Marcha Federal del Orgullo Antifascista y Antirracista fue convocada por más de un centenar de organizaciones LGTBIQ+ tras las declaraciones que Milei hizo en el Foro Económico de Davos, donde supuestamente comparó la homosexualidad con la pedofilia. En el mismo discurso, también anunció planes para eliminar el concepto de feminicidio del Código Penal, lo que alimentó aún más la indignación pública.
Como explica un manifestante, marchan “porque los derechos humanos más fundamentales están en riesgo, el derecho a la vida, a la libertad de movimiento”.
Poco después de asumir el cargo, el Gobierno de Milei desmanteló el Ministerio de Asuntos de la Mujer, dejando a muchas víctimas de violencia de género sin apoyo institucional y dejando a unos 500 trabajadores sin empleo.
Las protestas contaron con una amplia participación, y sindicatos y organizaciones antifascistas también se unieron a la marcha en solidaridad.
Según cifras oficiales, cerca de 40.000 funcionarios han sido despedidos durante el primer año de la Administración de Milei.
Además, Milei ha recortado los fondos para iniciativas de memoria histórica, una medida que probablemente retrasará los juicios por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la dictadura militar de Argentina. Mientras tanto, la tasa de pobreza del país se mantiene en el 56%, a pesar de que la inflación monetaria muestra signos de estabilización.
Crédito: EuroNews