Muertes en Mayotte ascienden a 39, pero las autoridades creen que no subirán mucho más
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Las autoridades francesas elevaron este martes el número de fallecidos por el paso del ciclón Chido en Mayotte hasta 39, aunque se mostraron optimistas respecto a que el balance no aumente mucho más.
La nueva cifra fue confirmada por la prefectura (delegación del Gobierno) de ese territorio ultramarino en un comunicado, organismo que también indicó que las tareas de búsqueda y rescate siguen en marcha en el devastado archipiélago del Índico.
Pese a lo complicado de la situación, esta mañana el prefecto François-Xavier Bieuville se había mostrado optimista respecto a que no hubiera que lamentar más muertes cuando el total de fallecidos era aún de 35.
“Nuestras investigaciones sobre el terreno sugieren que consolidaremos esta cifra de 35”, expresó en declaraciones a la cadena pública Franceinfo.
En cualquier caso, de confirmarse un balance de fallecidos cercano a estos números, quedarían descartados los peores augurios iniciales, que hicieron temer centenares o miles de muertos.
Anoche, el nuevo primer ministro francés, François Bayrou, se pronunció en un sentido similar en una entrevista con el canal BFMT poco después de anunciar su equipo de gobierno, al expresar su confianza en que las previsiones más “alarmistas” no se cumplirán y que los fallecidos finales se cuenten solo por decenas.
La misión de gestionar los territorios más allá de la Francia metropolitana Bayrou la ha puesto en Manuel Valls, ex primer ministro de François Hollande y la gran sorpresa entre los nombres anunciados este lunes para los ministerios del nuevo Gobierno.
Valls, que tomará posesión este mismo martes del Ministerio de Ultra Mar, aseguró que la reconstrucción de Mayotte será su prioridad inmediata y que planea viajar en persona hasta allí con el primer ministro “lo más rápido posible”, según indicó en una entrevista con la radio France Inter.
La situación sigue siendo complicada allí desde hace más de una semana por los estragos causados por el ciclón, la escasez de agua potable y alimentos, la necesidad de restaurar el sistema eléctrico y las comunicaciones.