Una mujer australiana identificada como Cheyenne, confesó haber ingerido las cenizas de su abuela, hizo esta sorprendente revelación al llamar a un programa de radio de Fox en Melbourne durante el segmento “Cashfessional”, según informó ‘Mirror’.
Cheyenne relató que, en medio del duelo por la pérdida de su abuela, le sugirió a su madre que hicieran lo mismo, una idea que planteó “sólo por diversión” y que su madre no rechazó. Además, comentó que también añadió cenizas en la comida de su hermano sin que él lo supiera.
“Mi abuela falleció en agosto del año pasado y fue incinerada. Mi familia y yo estábamos de luto, así que una noche fuimos a casa de mi madre y pensamos en animarla… comamos a mi abuela”, confesó la mujer.
La mujer cree que de esta manera sus abuelos “vivirán en ella para siempre”.
Crédito: El Imparcial