NASA descubre una ciudad se está deslizando hacia el océano 10 cm por semana
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Un estudio del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA reveló que la península de Palos Verdes, en California, se está deslizando hacia el océano Pacífico a una velocidad de hasta 10 centímetros por semana.
Este movimiento ha ocurrido durante décadas, pero se ha acelerado tras las intensas lluvias de 2023 y un invierno especialmente húmedo en 2024.
Utilizando el radar UAVSAR, la NASA monitoreó la zona entre septiembre y octubre de 2024, detectando un avance de 40 centímetros en solo cuatro semanas.
La situación preocupa a las autoridades, ya que compromete la estabilidad de cientos de viviendas y representa un riesgo para la infraestructura local. Ante el peligro, las autoridades han intensificado la vigilancia del área y están implementando medidas para reducir el impacto del fenómeno en la comunidad.
Para frenar el deslizamiento de tierra en la península de Palos Verdes, las autoridades han puesto en marcha diversas estrategias para proteger a los residentes y la infraestructura.
¿Qué están haciendo para evitar el desplazamiento?
Entre las medidas implementadas se encuentra la perforación de nuevos pozos de desagüe de hasta 250 pies de profundidad, con el fin de drenar el agua subterránea que acelera el movimiento del suelo.
También se desarrolla el Proyecto de Remediación del Deslizamiento de Portuguese Bend, que busca mejorar el drenaje superficial y evitar la acumulación de agua en el subsuelo. Este plan tiene un costo estimado de 33 millones de dólares, de los cuales 23.3 millones provienen de una subvención de FEMA.
Además, se ha lanzado un programa de compra de viviendas en zonas de alto riesgo, con un presupuesto de 42 millones de dólares, para que los propietarios puedan vender sus inmuebles y evitar futuras pérdidas.
Paralelamente, se realizan estudios geotécnicos para evaluar la estabilidad del terreno y determinar las zonas más vulnerables.
En septiembre de 2024, el gobernador de California, Gavin Newsom, declaró el estado de emergencia en Rancho Palos Verdes, lo que permitió desplegar recursos estatales para atender la crisis.
Crédito: Debate