El administrador de la NASA, Bill Nelson, presentó este lunes el Centro de Información sobre la Tierra, una exposición con la que buscan “acercar” el conocimiento que la agencia espacial tiene sobre la Tierra a “todo el mundo”.
La exposición, que se inaugurará mañana en el Museo Nacional de Historia Natural de la capital estadounidense, es fruto de una colaboración entre la NASA y el centro de investigación y educación Smithsonian.
“Lo bueno de esta exposición es que reúne el hecho de que el Smithsonian tenga su propio personal científico, que realiza muchas investigaciones basadas en la Tierra, con el increíble poder de observación de la Tierra de los satélites de la NASA”, señaló el director del museo, Kirk Johnson.
En la sala donde se encuentra la exposición, los visitantes podrán encontrar un hipermuro en el que ver vídeos y visualizaciones de datos de alta resolución, como mapas de seguimiento de los gases de efecto invernadero o de CO2, tres experiencias interactivas y diversos murales sobre el impacto del cambio climático.
Precisamente, entender y saber responder a los efectos del cambio climático y otras actividades que están reconfigurando nuestro planeta es uno de los objetivos en los que se centra esta experiencia divulgativa.
Además de lo que ya se ofrecerá desde que se abran las puertas, el centro prevé hacer encuestas a la audiencia en los próximos meses para saber cómo está siendo recibida la información que se ofrece y “si necesita plantearse de otra manera”, explicaron.
“Esto es solo el principio de la colaboración, los equipos de la NASA y el Smithsonian están trabajando juntos para convertir el Centro de Información de la Tierra en una herramienta para comunicar la ciencia y los conocimientos científicos recientes al gran público”, apuntó Johnson.
Por su parte, Nelson recalcó el trabajo de la NASA también como una agencia climática: “Se piensa en la NASA como una agencia espacial o de investigación aeronáutica, pero también es una agencia climática. El hecho de que pusiéramos naves en el espacio que observaran lo que ocurre en la Tierra nos ha proporcionado estos datos”.
“Me convertí en un ecologista cuando fui al espacio, y 38 años más tarde, todavía estamos estropeando la Tierra. Pero ahora, gracias al Smithsonian, gracias a Internet, estamos sacando la información para todo el mundo, para que todos en el planeta puedan convertirse en corresponsables de la preservación de esta hermosa y colorida creación que está suspendida en medio de la nada”, concluyó.