El Ayuntamiento de París ha otorgado este martes la ciudadanía honorífica al activista y defensor de las ballenas y las especies marinas Paul Watson, detenido en Groenlandia con una orden de extradición por parte de Japón.
La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, ha entregado simbólicamente el reconocimiento a Lamya Essemlali, presidenta de la filial francesa de la organización que fundó el activista, Sea Sepherd, quien ha agradecido en nombre del canadiense el compromiso de París por su liberación.
Tras el acto de entrega, Hidalgo ha asegurado ante los medios que ha pedido a Macron la concesión de la nacionalidad francesa como lleva reclamando Watson desde su arresto, cuya solicitud de asilo permanece también “en estudio” por parte del Ministerio de Exteriores francés.
“Conoce muy bien Francia, ha vivido mucho tiempo aquí, se ha casado aquí… He escrito a Macron y el Consejo de París también lo ha pedido”, ha remarcado la alcaldesa.
Watson, de 72 años, fue detenido cuando su embarcación atracó en Nuuk (Groenlandia) el pasado 21 de julio debido a la orden de arresto internacional emitida por Tokio en la que se le acusa de herir en 2010 a un marinero nipón mientras trataba de impedir la caza de ballenas.
Desde entonces, ha permanecido en prisión preventiva hasta que el Ministerio de Justicia danés decida si acepta la petición de extradición de Japón, que será previsiblemente la próxima semana.
Essemlali ha asegurado durante el acto de este martes en París que Watson se ha convertido en “un hombre más fuerte” en prisión, “casi inmortal”, y que está enterado de las acciones internacionales en su defensa.
La entrega de la ciudadanía parisina es un primer paso “simbólico” para convertir la detención de Watson en una cuestión internacional de derechos humanos y medioambientales, según ha destacado Hidalgo.