Pierde la vida en parto luego de una hemorragia por dengue
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Alma Rocío, originaria de Matamoros, Coahuila, una joven de 19 años, falleció mientras daba a luz en la clínica número 16 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Torreón.
Ella tuvo una severa hemorragia causada por dengue hemorrágico. Según Telediario, la joven fue ingresada al hospital para una cesárea, sin embargo, tras el parto, el virus desencadenó una hemorragia que los médicos no pudieron controlar, lo que le provocó la muerte.
A pesar de la tragedia, la bebé de Alma Rocío logró sobrevivir, gracias al esfuerzo de los médicos del IMSS.
El año 2024 ha sido particularmente crítico en la región donde se ha reportado un aumento significativo en los casos de dengue.
¿Cómo se transmite el dengue?
Esta enfermedad, transmitida por la picadura del mosquito hembra Aedes aegypti, es considerada la principal infección viral por vector en México.
Según el Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (Conave), el mosquito se infecta tras picar a una persona durante su periodo febril, permitiendo así la propagación del virus en la población.
La enfermedad se desarrolla en tres fases: la fase febril, la crítica y la de convalecencia.
Durante la primera fase, que puede durar de tres a siete días, el paciente presenta fiebre alta, dolor de cabeza, vómito y dolores musculares.
Hacia el final de esta etapa, pueden aparecer signos de alarma, como vómitos persistentes, dolor abdominal, dificultad respiratoria y sangrado.
En la segunda fase, denominada crítica, que dura de 24 a 48 horas, algunos pacientes pueden experimentar una caída brusca de la presión arterial y severos sangrados.
Finalmente, en la fase de convalecencia, los síntomas disminuyen gradualmente y la presión arterial se estabiliza.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el dengue infecta a entre 50 y 100 millones de personas al año en más de 100 países, afectando a aproximadamente el 40% de la población mundial.
Asimismo, sugieren el uso de repelente, telas mosquiteras y eliminar recipientes que puedan acumular agua, ya que estos se convierten en criaderos de mosquitos.
Crédito: El Imparcial