El tráfico en las carreteras francesas se está recuperando lentamente, después de que el temporal de nieve y hielo dejase cerca de 2.000 camiones bloqueados en dos tramos de autopista hasta esta mañana, y los servicios meteorológicos han levantado la totalidad de las alertas naranjas vigentes desde la víspera.
Esta mañana, el país había amanecido con 31 departamentos en ese nivel de vigilancia -el segundo más grave tras la alerta roja- y 29 de ellos correspondían a la nieve y el hielo del temporal Caetano y otros dos eran zonas de Córcega a causa del viento, que llegó a alcanzar ráfagas de hasta 160 a 180 kilómetros al norte del Cabo Corso.
Al mediodía, la agencia estatal Météo France levantó las alertas naranjas en todo el territorio e informó de que “el temporal Caetano ha abandonado ya el país”.
No obstante, apuntó que “la próxima noche las temperaturas volverán a bajar por debajo de cero grados en Normandía y en el noroeste” y que por tanto habrá “formación de hielo por la lluvia”.
En línea con la mejora de las condiciones, el tráfico en las carreteras comenzó a mejorar a lo largo de la mañana, incluido el de camiones tras los severos bloqueos de las últimas horas.
Uno de los mayores problemas se dio en la autopista A36 en el departamento de Doubs (noreste), donde cientos de camiones quedaron bloqueados toda la noche e impidieron el paso del resto de los vehículos.
A primera hora de la mañana, el ministro de Transportes, François Durovray, cifraba aún en 750 los camiones inmovilizados y la titular de Transición Ecológica, Agnès Pannier-Runacher, subrayó en una entrevista al canal BFMTV que en esa autopista, “si había camiones es porque algunos no han seguido las consignas”, ya que se les había prohibido circular.
También hubo bloqueos importantes en la A25 entre Ruán y Le Mans (noroeste), donde hasta esta mañana había un millar de camiones inmovilizados.
En la A6B se produjo un accidente grave durante la noche, a la altura de la localidad Chevilly-Larue, con un autobús y cuatro turismos implicados, indicaron los cuerpos de bomberos.
No hubo que lamentar fallecidos, pero 36 personas resultaron heridas y cinco de ellas de gravedad, aunque sin riesgo para sus vidas.
En total, los servicios de protección civil franceses cifraron en 1.200 las intervenciones realizadas desde ayer en relación a este temporal, que además de la nieve también trajo vientos y que a primera hora de la mañana mantenía a 200.000 hogares aún sin electricidad, 70.000 menos que a última hora de ayer.
En cuanto al transporte aéreo, que también se vio afectado, Durovray señaló que esta mañana había retrasos de hasta dos horas en los aeropuertos de París, después de que la pasada tarde se tuvieran que cancelar el 10 % de los programados en el de Roissy-Charles de Gaulle (norte de París).
El titular de Transportes se mostró no obstante optimista sobre el restablecimiento progresivo de la normalidad a lo largo de la jornada.
Los trenes tampoco circulaban en Normandía esta mañana para poder verificar las infraestructuras y también había incidentes por caída de árboles en las vías en el País del Loira, Nueva Aquitania o Ile-de-France.
El transporte escolar se ha suspendido igualmente este viernes en muchos departamentos afectados por la nieve, como los de Normandía o varios de Ile de France, del centro y del este.
Caetano, que ha atravesado el norte del país de oeste, dejó el jueves entre 2 y 8 centímetros de nieve en zonas llanas del norte de Francia y hasta 10 a 15 centímetros en zonas más elevadas.
Las temperaturas han sido negativas por la noche, especialmente en el noreste de Francia.