La esposa de Julian Assange, Stella Assange, dijo este martes que se siente “eufórica” tras el acuerdo alcanzado entre el activista australiano y la justicia estadounidense y que la “prioridad” ahora es que su marido “recupere la salud”.
En declaraciones a la emisora británica BBC Radio 4, la abogada confesó que, ahora mismo, siente “un torbellino de emociones” tras la liberación de Assange de la prisión británica de alta seguridad de Belmarsh tras el acuerdo alcanzado con Washington.
“Siento un torbellino de emociones. Estoy eufórica. Francamente, es increíble. Es como si no fuera real”, afirmó Stella Assange, que reveló que hasta las últimas 24 horas, no estuvieron “realmente seguros de que estaba ocurriendo realmente”.
La mujer del exhacker australiano indicó asimismo que aún no les ha dicho a sus dos hijos pequeños que su padre ha sido liberado y que les están compartiendo información “de manera gradual” debido a que se trata de una situación delicada.
“Nunca lo han visto fuera de (la cárcel de) Belmarsh y toda su interacción se ha desarrollado dentro de una sala de visitas durante poco más de una hora, de manera muy restrictiva, donde no se podía caminar”, recordó.
También apuntó que todavía no ha tenido la “oportunidad” de mantener “una conversación larga” con su esposo tras los últimos acontecimientos, pero que “la prioridad ahora es que Julian recupere la salud de nuevo; ha estado en un estado terrible durante los últimos cinco años, sin contacto con la naturaleza”.
“Nuestro deseo ahora es tener tiempo y privacidad para empezar este nuevo capítulo”, dijo.
Sobre la salida de la cárcel del fundador de WikiLeaks, Stella Assange comentó que se había llegado a un “acuerdo en principio” entre su marido y el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
“Y esto tiene que firmarlo un juez en estas Islas Marianas, en el Océano Pacífico, donde va a ir, pero está ahora mismo en Bangkok (donde su avión aterrizó para repostar)”, señaló.
Una vez ese acuerdo sea rubricado por un magistrado, entonces será “formalmente real”, según comentó Stella, que admitió que debido al acuerdo está “limitada” en cuanto a lo que puede decir ahora mismo sobre el caso.
WikiLeaks, el portal que fundó el activista, colgó imágenes en sus redes sociales de Assange embarcando ayer por la tarde en un avión en el aeropuerto británico de Stansted.
El fundador de Wikileaks, de 52 años, tiene previsto comparecer ante un tribunal de Islas Marianas el miércoles a las 9:00 hora local (23:00 GMT del martes) y declararse culpable de las acusaciones en su contra antes de viajar a Australia tras más de 12 años de litigio.
Assange llegó a un acuerdo con EE.UU. por el que se declarará culpable de los delitos por filtración de secretos y se fijará una pena de 62 meses de cárcel, equivalentes al tiempo que ya ha cumplido en la prisión de alta seguridad en Reino Unido.