Más de 350.100 personas han tenido que abandonar sus casas desde mediados de marzo por las lluvias torrenciales e inundaciones que se suceden en Kenia, Somalia, Burundi y Tanzania, informó este sábado la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
“Las fuertes lluvias e inundaciones repentinas han afectado a 848.773 personas, incluidos 350.155 desplazados, en Kenia, Somalia, Burundi y Tanzania”, señaló la OCHA en un comunicado.
Kenia es el país más afectado, con al menos 281.835 personas desplazadas, 267 muertos, 188 heridos y 75 desaparecidos.
La agencia de la ONU advirtió de que está previsto que las lluvias fuertes persistan en Kenia, aunque es probable que su intensidad disminuya, según el Departamento Meteorológico de Kenia.
En Tanzania está previsto que las lluvias continúen en algunas zonas.
Más allá de la pérdida de vidas humanas, las fuertes precipitaciones también han afectado al sustento de la población y a la infraestructuras de los países mencionados.
La ONG Human Rights Watch (HRW) ha denunciado que el Gobierno keniano no actuó a tiempo ni ha respondido de manera adecuada a las graves inundaciones, a pesar de las predicciones meteorológicas con las que contaba.
Este año, la temporada larga de lluvias, que va de marzo a mayo y afecta a todo el este de África, se ha visto intensificada por el fenómeno meteorológico de El Niño, un cambio en las dinámicas atmosféricas ocasionado por el aumento en la temperatura del océano Pacífico.