
*Habrá tarifas justas para arrastre y corralones
“El que tengamos seguridad nos ayuda a que se generen más inversiones y empleo”, refrendó el gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, en la puesta en marcha del Operativo Paradero Seguro, donde dijo que seguridad y justicia con riqueza comunitaria son elementos en pro del desarrollo humano para disminuir pobreza, marginación y vulnerabilidad de las personas.
Acotó que el gobierno estatal vislumbra 27 Casas Carmen Serdán, 15 centros estratégicos de seguridad y atención al turismo, acompañamiento con 5 paraderos seguros en la Autopista México-Puebla-Orizaba para proteger a los transportistas, así como hacer frente al calvario y sufrimiento de los transportistas y ciudadanos con el tema de arrastre y corralones, donde se debe de cobrar lo justo.
Hay estadísticas donde le sale más caro al transportista el arrastre la grúa y rescatar la unidad del corralón que lo que le robaron, o es más caro el resguardo en el corralón que el valor de la unidad, observó el gobernador Armenta, quien evidenció que las unidades son desvalijadas en esos sitios, por lo que giró la instrucción para revisar los corralones, donde el 70 por ciento son irregulares, por lo que serán intervenidos y clausurados los que se conviertan en centros de saqueo y robo.
Además se establecerán tarifas en la Ley de Ingresos para que el costo sea mínimo y serán supervisados los corralones y el arrastre de unidades, anunció, al llamar a los afectados a denunciar a quienes pidan moches o milpa para liberar las unidades en corralones.
Armenta dijo que los Paraderos Seguros reflejan la respuesta en torno a ventanas de oportunidad en temas como seguridad, que es la tarea más importante, donde el principal reto es que las familias que transitan por las carreteras puedan hacerlo con seguridad y confianza.
Explicó que se revisó donde establecer los Paraderos Seguros, al revelar que el primer punto en el kilómetro 144 de la Autopista México-Orizaba corresponde a una estación de gasolina de un migrante que retorno a Puebla y que es ejemplo de que el sueño mexicano es una realidad, de lo que se tiene que hacer para crear lugares adecuados.
El derecho humano de la vida tiene que ver con la seguridad, la alimentación, la salud, la educación.
El que tengamos seguridad nos ayuda a que se generen más inversiones y empleo.
Falta por mucho hacer, sin duda, pero hay avances en reducción de homicidios dolosos en 3.5% y en feminicidios en 20 por ciento, reflejo de la operación de las Casas Carmen Serdán de protección a las mujeres, con baja de 10.4% en robo domiciliario y del 31.9 por ciento menos en transportistas, aunado a que se recuperaron en 100 días más vehículos que en todo el año pasado.
El general D.E.M. Comandante Interino de la Sexta región Militar de la Sedena, Héctor Ávila Alcocer, resaltó el articulado de voluntades y trabajos de los tres órdenes de gobierno, la coordinación y cooperación, incluidos los trabajos de las Fiscalías, que permiten observar que hemos avanzado y concretando acciones para un ambiente más seguro, prueba de los cambios que eran necesarios.
El coordinador estatal de la Guardia Nacional en Puebla, Vicente Javier Mandujano Acevedo, recalcó que el cuarto de los ejes en materia de seguridad pública instruye la colaboración interinstitucional para enfrentar el fenómeno delictivo en carreteras del país, incluido el estado, donde el gobernador Alejandro Armenta ha permitido la coordinación y el reforzamiento de la seguridad, al igual que la colaboración con los empresarios.
El paradero permite operaciones para estándares amplios de seguridad, descanso de conductores, vigilancia para evitar comercio ilegal y venta de hidrocarburos y estupefacientes, dijo el representante de la GN, al destacar sumarán cinco espacios similares en Puebla.
En el inicio del Operativo Paradero Seguro para cuidar a quienes transitan por Puebla, la presidenta del Centro Empresarial (Coparmex), Beatriz Camacho, destacó que esta iniciativa más que una acción táctica de seguridad, es una muestra clara que con trabajo conjunto se pueden dar soluciones reales y tangibles para la vida de las personas.
“Si se puede construir un entorno más seguro cuando hay voluntad y diálogo genuino”, dijo, al apuntar que la gestión del paradero es un acto de justicia social, que permite transito con seguridad, la dignidad de quien nos cuida y asumir responsabilidad compartida.